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Technology trends for 2024: Greater data management and more interconnectivity.

Technology trends for 2024: Greater data management and more interconnectivity.

A medida que la tecnología avanza, las industrias tienen la opción de sumarse a la ola de la nueva Revolución o mantener sus procesos con la vieja escuela. El gran desafío será saber si luego de varios años, quedarse en “old School” podrá ser una opción o no.


La transformación digital y el Internet de las Cosas (IoT) llegaron para quedarse, y más aún. Llegaron para transformar conceptos, acciones y una propia cosmovisión industrial. Conocida como la Cuarta Revolución Industrial, o “Industria 4.0”, el impacto de las últimas y mejores tecnologías en las cadenas de suministro, almacenes y manufactura ya es profundo y apenas comienza.


A medida que nos acercamos a 2024, podemos observar que si bien la Industria 4.0 ya está establecida, es probable que en 2024 se produzca un crecimiento astronómico. A medida que cada vez más empresas adopten la Cuarta Revolución Industrial, el proceso de transformación digital continuará acelerándose y no sólo se limita a la interconexión de dispositivos cotidianos, sino que está escalando hacia una integración más profunda en entornos comerciales e industriales.

Según informes de Emergen Research, se espera que el mercado global de la Industria 4.0 alcance un valor de $279.75 mil millones para 2028, con una sólida tasa de crecimiento anual compuesto (CAGR) del 16.3%. Gran parte de este crecimiento provendrá también del sector industrial.

¿Qué son los dispositivos IoT?

El Internet de las cosas ( dispositivos IoT) describe la red de objetos físicos que llevan incorporados sensores, software y otras tecnologías con el fin de conectarse e intercambiar datos. Mediante ciertas tecnologías, los dispositivos comparten y recopilan información con una mínima intervención humana.

Estos dispositivos van desde objetos domésticos como lavarropas, autos, o celulares; hasta herramientas o máquinas de las industrias más sofisticadas. Debido a los dispositivos IoT es posible una comunicación fluida entre personas, procesos y cosas. Los sistemas digitales pueden grabar, supervisar y ajustar cada interacción entre las cosas conectadas. 
A nivel industrial, supone un gran salto en la optimización de tiempo, recursos y gastos de mantenimiento en tanto IoT es capaz de administrar gran cantidad de datos de manera que pueda establecer por ejemplo, un mantenimiento preventivo y predictivo de una máquina, evitando su rotura o desgaste extremo sólo con un alerta a tiempo.

¿Qué tecnologías han hecho posible el IoT?

El concepto de IoT existe desde hace mucho tiempo, sin embargo, su creciemiento en cuanto a desarrollo y funcionalidades es cada vez mayor.

  • Los sensores de bajo costo y baja potencia, permiten una conexión rápida y fluida entre dispositivos y la red.
  • La conectividad inalámbrica fluida con la nube, sumado a una gran cantidad de protocolos de red para Internet ha facilitado la transferencia de datos eficientemente. 
  • Las plataformas en la nube permiten a las empresas y a los consumidores acceder a la infraestructura que necesitan para escalar sin tener que administrarlo todo.
  • La suma del machine learning, con el acceso a cantidades grandes y variadas de datos, posibilitan que las empresas puedan recopilar información de forma más rápida y fácil. 
  • La inteligencia artificial conversacional y los avances en las redes neuronales han llevado el procesamiento del lenguaje natural (PLN) a los dispositivos IoT, para hacerlos atractivos, asequibles y viables para uso doméstico.

La evolución de los dispositivos IoT seguirá escalando a pasos agigantados. Desde la industria del agro, hasta la minería, desde la producción de manufacturas hasta la producción de servicios. Todos ellos se verán atravesados por esta nueva revolución en la que se conjugan el manejo de gran caudal de información, el análisis cruzado de datos y la toma de desiciones en base a datos duros que emergen del analisis de un software altamente programado para cada una de las industrias y sus procesos específicos.

Se prevé que para el 2025 sean 22 mil millones los dispositivos IoT conectados a internet y que en el año 2026 el 41,3% tengan algún tipo de tecnología de conectividad LPWA. El mundo físico y el digital van de la mano y cooperan entre sí. ¿Estás listo para conocer el impacto de estos dispositivos en tu negocio?

Ventajas y desventajas de los dispositivos IoT

El Internet de las cosas es una tecnología con grandes posibilidades, pero también plantea algunas dudas que convienen tener en consideración.

Ventajas del Internet de las cosas

Capacidad de conectarse a la red y por consecuencia, tener acceso a todo lo que esto supone, desde contenidos hasta información almacenada. 

Intercambio de información de forma rápida y en tiempo real, puede ser muy útil en diferentes ámbitos de aplicación, ya sea detectando un problema de intrusión a un sistema de ciberseguridad o un incendio en un espacio controlado. 

Ahorro energético gracias al monitoreo y automatización de los procesos. Estos se llevan a cabo de forma mucho más controlada, lo que repercute en un menor consumo y, en consecuencia, en un mayor ahorro. 

Procesos más sostenibles, permitiendo un mayor ahorro de los recursos y una mayor sostenibilidad, ya que se utiliza solo lo necesario. 

Comunicación con el entorno directo más cercano, es decir, podemos abrir y cerrar puertas desde nuestro teléfono celular, o podemos recibir información útil dependiendo de cuál sea nuestra posición geolocalizada en cada momento. 

Desventajas del internet de las cosas

La información no se encuentra cifrada y, en consecuencia, resulta muy sencillo acceder a ella. Es necesario establecer ciber seguridad y tener un equipo dedicado a la programación y el cuidado de la información. Claro que existen diferentes niveles de importancia y valorización de los datos adquiridos, en cualquier caso, los datos son información privada de la empresa y debe ser cuidado y resguardado antes cualquier tipo de intromisión o robo.

Requiere de una inversión previa en tecnología, es decir, requiere de la adquisición de los dispositivos con la tecnología necesaria para que se puedan conectar a Internet. Si bien esta inversión puede llegar a ser costosa, dentro del análisis costo-beneficio en la rentabilidad futura debe tenerse en cuenta los ahorros en, por ejemplo, arreglos de maquinaria cuyas roturas no fueron adelantadas por un programa de mantenimiento predictivo que sí puede realizar un dispositivo IoT.

La falta de compatibilidad debido a que los sistemas IoT aún no están estandarizados podría derivar en que determinados dispositivos no puedan trabajar de forma conjunta entre sí a pesar de estar diseñados para la misma función. Se necesitará aggiornar las tecnologías de manera que pueda trabajar en conjunto en la sinergia de envío y recepción de información.

Dispositivos IoT en las empresas 

En varias industrias, la aplicación de IoT es cada vez más usual.

Muchas industrias están implementando dispositivos conectados e inteligentes. El objetivo es optimizar sus operaciones, construyendo vastas redes que pueden, en muchos casos, resultar muy complejas de administrar, escalar y proteger. 

Algunos ejemplos de IoT en industrias.

  • La industria minera puede adquirir un sistema de monitoreo, que con AI permite realizar mantenimientos preventivos, ganando eficiencia operacional y de seguridad. 
  • La agricultura puede acceder a soluciones que permiten controlar variables ambientales, de terreno e hídricas, que generan mayor productividad a los campos. 
  • En la industria logística, la trazabilidad a los sistemas de delivery generan mayor control, calidad de servicio y optimizaciones por cálculo eficiente de rutas de despacho.
  • Para el transporte es útil controlar la flota y monitorear en tiempo real las variables como distancia recorrida, velocidad, lugares visitados y ubicación, entre otras.

El gran desafío: pertenecer o quedar afuera.

A medida que la tecnología avanza, las industrias tienen la opción de sumarse a la ola de la nueva Revolución o mantener sus procesos con la vieja escuela. El gran desafío será saber si luego de varios años, quedarse en “old School” podrá ser una opción o no.